Russo pronunció la palabra Vértigo y esa es la imagen que se le refleja a este Racing cuando se para frente al espejo, ya que es un equipo que frente a la falta de fútbol le pone ganas y por lo menos ahora le sumó el sacrificio tanto pedido por los hinchas. A veces parece que tiene un venda en los ojos pero igual va, a los empujones pero va y hasta llega con peligro, porque Hauche tuvo dos, una pasó muy cerca, Rosano una en el palo y otra que se quedó en el techo del arco, Martinez una de cabeza y la única clara que le llegó a Bieler fue un centro atrás que, cuando la iba a empujar, se la sacaron al corner. Calro que todo eso fue en el primer tiempo y en la segunda parte le agarró la amnesia que sufrió en parte de este torneo y llegó muy poco, solo una de Fernández y un centro atrás de Luguercio.
El equipo se fue aplaudido y parece que se roconcilió con la gente, claro que con alguien descargó la bronca de no haber podido ganar y el candidato número uno fue el árbitro del partido, Diego Abal, quien no cobró un penal anté Aveldaño y quedó la duda si fue mano en el tiro libre de Bieler al final del encuentro.
La recta final muetra un fixture complicado para Racing, ya que se vienen Estudiantes, Vélez, el partido postergado frente a Atlético y Banfield. Algo positivo es que se si dan algunos resultado se podría estar enfentando a los Tucumanos y a Chacarita ya descendidos . Lo cierto es que en el horizonte el primero que aparece es el Pincha, que jugará sin Verón, pero sigue siendo el mejor equipo de la argentina y Racing tendrá que ir en busca de los tres puntos.
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